5/02/2006

* DECLARACION DE NAIGUATA

DECLARACION DE NAIGUATA
El CNP repudia el desbordado sensacionalismo, el soborno, el palangre y se enfrenta al ejercicio ilegal de la profesión
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Dos problemas afectan de manera significativa la profesión periodística en nuestro país en esta época: el deterioro de los valores éticos y el ejercicio ilegal.
Por imperativo de la Ley de Ejercicio del Periodismo y expreso mandato de sus Estatutos, corresponde al Colegio Nacional de Periodistas aunar sus esfuerzos en forma decidida, firme e ininterrumpida para emprender acciones que nos permitan enfrentarlos y combatirlos y encontrar las soluciones que nos permitan rescatar gradualmente la profesión, para que esté al servicio del progreso social, de la nación venezolana, de la cultura y de todo el pueblo.

PRIMERO
El deterioro de la ética del periodista se ha venido produciendo dentro del marco de la quiebra de los valores morales de la sociedad venezolana, del desarrollo de afán de lucro y de la ganancia fácil y exagerada como últimos objetivos del hombre, en momentos en que la corrupción se expanda por todo el país y a los más variados niveles, tanto en el sector público como en el sector privado, sin que ejerzan acciones ejemplarizantes de castigo a los culpables.
En tales condiciones se hacen cada día más frecuentes los casos de falta de ética, en sus más variadas manifestaciones de periodistas que tienen la responsabilidad de informar a la colectividad de manera veraz, oportuna e integral, con el propósito de poner esa información al servicio de intereses contrarios a los de la comunidad.
Posiblemente ninguna otra profesión es hoy más asediada, desde el sector público y el sector privado, para distorsionar lo que son sus verdaderos objetivos y violentar sus principios éticos. Este asedio tiene diversas manifestaciones, que van desde la muy conocida forma de palangre, hasta otros más sutiles y encubiertas que, en el fondo no buscan otro objetivo que el de mediatizar la labor periodística.
A estas causas de orden general, presentes en nuestra sociedad e independientes de nuestra voluntad, se unen otras particulares. En tal sentido debemos reconocer que a pesar de todos los esfuerzos que el gremio ha hecho desde 1941, año de fundación de la Asociación Venezolana de Periodistas, no ha sido posible crear una conciencia colectiva que garantice una permanente y activa vigilancia de la conducta de los periodistas. Como factores coadyuvantes de los propietarios de los medios de comunicación colectiva, que en su propósito de obtener mayores ganancias, permiten que se creen condiciones de trabajo estimulantes de conducta reñidas con la ética, y finalmente, hay que señalar la formación universitaria en las Escuelas de periodismo, que en ocasiones no han valorado la necesidad de fortalecer las defensas éticas de los futuros profesionales.

SEGUNDO
Ante los hechos señalados, la Junta Directiva Nacional del Colegio nacional de Periodistas y los Secretarios Generales y otros directivos seccionales, reunidos en la Casa Vacacional del Periodista:
EXHORTAMOS a quienes tienen responsabilidades directivas en el sector público y en el sector privado, a reflexionar sobre su responsabilidad en el quebrantamiento de la ética de los periodistas venezolanos, y a examinar si en las relaciones establecidas por ellos con los profesionales de la prensa, están presentes sobornos, en cualquiera de sus manifestaciones, tal como lo hemos denunciado.
RATIFICAMOS el planteamiento que en este sentido formuló la Junta Directiva Nacional del Colegio Nacional de Periodistas, al Ministro de Información y Turismo en la confianza de que habrá una revisión de tal política en todas las dependencia públicas y tendremos la necesaria colaboración para establecer las sanciones disciplinarias contempladas en la Ley.
REITERAMOS el llamamiento contenido en el Código de Ética a los propietarios y concesionarios de medios de comunicación, para que estas normas sirvan de guía en la orientación de los respectivos medios, y a colaborar con el CNP en su propósito de combatir la violación a nuestros principios éticos.
PEDIMOS a las Escuelas Universitarias de Periodismo o Comunicación Social una mejor valoración de la ética profesional en la formación de los futuros periodistas, y buscar formas docentes que garanticen una mayor orientación de los estudiantes sobre estos problemas, y una mayor difusión del Código de Ética.
LLAMAMOS a los representantes del Poder Público, a los dirigentes de los Partidos Políticos y a las direcciones gremiales, a actuar por la preservación de los valores morales de la sociedad venezolana, y exigir sanciones ellos mismos para quienes resulten culpables de soborno u otras formas de corrupción pública.

TERCERO
Por nuestra parte, actuando como dirigentes del gremio de periodistas venezolanos, comprometemos ante la opinión pública a:
MANTENER una actitud de vigilancia en el cumplimiento del Código de Ética del Periodista Venezolano, y demandar de los respectivos Tribunales Disciplinarios una actuación en correspondencia con el mandato estatutario y con este compromiso público.
RECOMENDAR a la Junta Directiva Nacional la convocatoria de representantes de los Tribunales Disciplinarios Seccionales con el Tribunal Disciplinario Nacional, a fin de de examinar el problema en su conjunto.
DENUNCIAR a los funcionarios, ejecutivos, instituciones públicas o privadas responsables de sobornar a periodistas, o de inducirlos al quebrantamiento de las normas éticas profesionales.
PROMOVER una campaña de divulgación del Código de Ética del Periodista entre los miembros del Colegio, profundizar en el examen de los problemas que se desprenden de su aplicación, e invitar a otros sectores sociales a colaborar con el CNP en estos propósitos.
ORGANIZAR un Seminario Nacional sobre la ética del periodista, con obligatoria participación de representantes de todas las seccionales, y llamar a las Seccionales a organizar seminarios y foros con igual orientación.
AGILIZAR el levantamiento del Registro Nacional de Publicaciones, como medio para combatir la piratería en la edición de revistas y otras publicaciones irregulares.

CUARTO
Declaración sobre el Ejercicio Ilegal del Periodismo
Durante varios años el gremio libró importantes jornadas de lucha por la aprobación de la Ley de Ejercicio; con serias fallas, este instrumento fue definitivamente aprobado en agosto de 1972 y está en plena vigencia desde la constitución del Colegio Nacional de Periodistas. De acuerdo a la Ley, para ejercer la profesión de periodista es indispensable estar inscrito en el Colegio.
Instalados sus organismos de dirección, la Junta Directiva Nacional giró instrucciones para que en cada Seccional, de acuerdo a las condiciones existentes, se estudiara el problema y se iniciara un gradual proceso orientado a hacer cumplir la Ley. Transcurridos varios meses, observamos cómo en todo el país existen más de cuatrocientas (400) personas que sin ser colegiados, están ejerciendo la profesión y que en muchos casos se trata de personas que ni están cursando Periodismo, ni tienen solicitudes pendientes de decisión.
Contadas seccionales han tomado iniciativas y acudido a los organismos estatales correspondientes (Fiscalía General, Tribunales Civiles, PTJ) en solicitud de intervención para hacer cumplir la Ley y preservar el ejercicio del periodismo para los miembros del Colegio. Estas acciones no son suficientes. Es indispensable que todas las Seccionales donde existan casos de ejercicio ilegal hagan cumplir la Ley, y que instrumente mecanismos para incorporar a todos los colegiados a esas tareas. Esta acción del Colegio no afecta ni puede afectar la libertad de expresión ni lesiona los derechos de otros profesionales y está perfectamente enmarcada dentro de los términos de la Ley.
DECLARA:
1 Para ejercer la profesión de periodista debe llenarse, por parte de los interesados todos y cada uno de los requisitos señalados por la Ley y su Reglamento. Son periodistas quienes hayan obtenido el Título en una Universidad venezolana, o quienes hubieren revalidado y aquellas que están amparadas por las previsiones del Artículo 43 de la Ley de Ejercicio del Periodismo, pero todos para ejercer legalmente la profesión han de cumplir con la obligación insoslayable de la inscripción en el Colegio Nacional de Periodistas. Lo que significa que ejercen ilegalmente la profesión aquellos que aún siendo periodistas, realicen tales actividades sin ser miembros del Colegio. Quienes ejerzan la profesión y no estén inscritos en el Colegio Nacional de Periodistas, incurren en delito.
2 Las personas cuyas solicitudes de inscripción en el Colegio fueron rechazadas y no han sido modificadas por la Comisión Organizadora de tal rechazo, no pueden ejercer las funciones propias del periodismo profesional por cuanto no cumplen lo establecido en el Artículo 2 de la Ley de Ejercicio del Periodismo, que exige la previa inscripción en el CNP.
3 Las directivas Seccionales del CNP tienen la obligación de hacer cumplir lo establecido en el Acuerdo 21 en sus numerales 1º y 3º que sobre el ejercicio ilegal del periodismo, aprobó la I convención Nacional del CNP: “Exigir a las empresas periodísticas, a los órganos de difusión del Estado, a las instituciones y en general a quienes necesariamente tienen que contratar periodistas, a que cumplan con la contratación de personal para el ejercicio del periodismo con las disposiciones contenidas en la Ley y su Reglamento” “El Colegio Nacional de Periodistas se reserva el derecho de intentar las acciones legales correspondientes contra quienes ejercen ilegalmente la profesión.”
4 Recomendar a la Junta Directiva Nacional, que a reserva de las acciones legales a que haya lugar, pase a los Tribunales Disciplinarios correspondientes a los afiliados que, en ejercicio de funciones ejecutivas en los medios, patrocinen, amparen o encubran el ejercicio ilegal de la profesión, y exhortar a los miembros del Colegio el deber en que están, según el numeral 4º del Artículo 30, de informar a los órganos del Colegio las infracciones de la Ley y su Reglamento.
5 El único documento que identifica al periodista para el ejercicio del periodismo es el carnet emitido por el Colegio Nacional de Periodistas. Cualquier otro documento expedido por instituciones públicas o privadas, carece de validez.
6 Recomendar a la Junta Directiva Nacional y a las directivas Seccionales, para proceder judicialmente, de inmediato, contra los casos notorios y concretos de ejercicio ilegal de la profesión.
7 Recomendar a la Junta Directiva Nacional, la redacción de un proyecto de reforma integral de la Ley de Ejercicio del Periodismo, por cuanto la vigente, amén de imperfecta, tiene elementos violatorios en su propia esencia.
Firmado, JUNTA DIRECTIVA NACIONAL, período 1976-1978, Héctor Mujica; Presidente, Omar Pérez; Vicepresidente, Eleazar Díaz Rangel; Secretario General, Rubén Chaparro Rojas; Secretario de Organización, Guillermo Pantin; Secretario de Finanzas, Aquiles Márquez; Secretario de Asuntos Profesionales, Pedro Manuel Vásquez; Secretario de Relaciones, Héctor Stredel; Secretario de Publicaciones, Teresa de Entrena; Secretaria de Documentación. SECRETARIOS GENERALES SECCIONALES: Antonio Rafael Rodríguez; Anzoátegui, Oswaldo Montero; Apure, Leonel Salom; Bolívar, Alí Caccvale; Carabobo, Arístides Gómez; Ciudad Guayana, Omar Bracho; Costa Oriental del Lago, Gilberto Alcalá; Distrito Federal, Lino Revilla; Falcón, Miguel Quintana Delgado; Guárico, Rafael Montes de Oca; Lara, Eccio Rojo; Mérida, Luís Guillermo Valdivieso; Miranda, Rubén Ferrer Rosas; Monagas, Aquilino José Mata; Nueva Esparta, Virgilio Ortega; Punto Fijo, Ramón Salcedo; Portuguesa, Luís Marcano; Sucre, Jesús Romero Anselmo; Táchira, José María Gil; Yaracuy, José A. Ugas Morán; Zulia. Estuvieron ausentes: Antonio María Pérez; Aragua, Rafael Guedez Acevedo; Barinas, Guillermo Montilla; Trujillo y Edmundo Barrios; El Tigre.
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Resolución unánime del Secretariado Nacional del Colegio Nacional de Periodistas realizado en la Casa Vacacional del Periodista, en Naiquatá, Departamento Vargas, los días: 25 y 26 de febrero de 1977.

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